En un escenario desnudo, sin mayores telones que aforen o escenografías que engalanen, con el espacio teatral prácticamente vacío… No, no, no. ¿Qué estoy diciendo? Esperen un momento, comencé mal; esto primero que he dicho no es del todo cierto. ¿Dije escenario vacío? No, no y no. Corrijo: Con muy pocos elementos sobre las tablas, el universo del unipersonal “NO CONCRETO” convoca a la ciudad entera y el teatro se colma: caminatas nocturnas sobre Calzada de Tlalpan en el encuentro electrizante de sus hoteles y sus putas, música de los puestos callejeros que con cumbias, salsas y bachatas construyen la atmósfera del paso citadino, callejones rinconeros develándose como lugar inesperado para el besuqueo adolescente, soledad de las banquitas en los parques enrejados manifestando su falta de luz y el peligroso ahogo de la asfixiante sombra cómplice; y, también, el humano cruce con el canto inconfundible del señor de los tamales entonando su vendimia, o el brazo correoso del a...
Artes escénicas, artes visuales e interdisciplina.